"El ataque de las gramíneas". Valle de Otal

Viva San Fermin!!! Gora San Fermin!!! Pero este año desde la lejanía. Y es que uno tiene una edad que ya no es como para salir. Asi tal cual, aunque habrá quien piense lo contrario e incluso si estoy tonto o que. Pero la verdad es que no y aquí el uno tiene y tendrá una edad en la que tiene que hacer lo que quiere, no lo que a los demás les parece que tendría que ser. 

Por eso este 6 de julio, luciremos el pañuelico pero por las alturas.

Mientras unos discuten si sangría o kalimotxo, otros debatimos sobre el destino. Y cuando pelean con el pantalón blanco a ver si entra , que el jodido se ha encogido; nosotros estamos dándole al coco de que llevar o no a la chepa , pues otra vez iremos con la casa a cuestas, esta vez por la Sª de Tendeñera. 

En estas dos jornadas , esperando en ambas  un buen tiempo sin parangón, ascenderemos el primer dia a la cumbre de Tendeñera y remataremos el día con un vivac por allá arriba. Para cerrar la vuelta, coronaremos Otal y regresaremos hasta Bujaruelo.

Buen plan san ferminero, más tranquilo y fructífero. 

Antes de que la ciudad se tiña de blanco y rojo, partimos lejos de todo jolgorio. En camino apacible, ponemos rumbo a uno de esos rincones paradisíacos de los pirineos, que por muchas veces que vayas, nunca deja de sorprender. Cuando asoman las murallas rocosas de Mondarruego, carta de presentación de Ordesa, se deja notar el gentío al que atrae.

Pasado un mal encontronazo con un bus, poco cortés y educado, nos desviamos a la parte más salvaje y tranquila de la zona. Entramos en las angosturas del valle de Bujaruelo.
Por la pista, cuyos parajes invita a los ojos a irse a todas partes menos al volante,  vamos a la contra de las aguas del Ara hasta que asoma el refugio de Bujaruelo y el valle se abre por completo. Un vistazo rápido y la cosa está bastante prieta, casi no entra ni un folio de canto. Sin perder el tiempo buscamos un buen hueco y nos asentamos, para desplegar todo el tinglado. Ya solo sacar los mochilones supone casi como una primera cuesta, y repuesto de ello nos calzamos las botas para salir antes del disparo del cohete.

Valle de Otal desde Bujaruelo

Intento de recorrido circular a los picos Tendeñera y Otal,partiendo desde Bujaruelo y ascendiendo desde el valle de Otal. Datos GPS: 14 km; ± 620 m; 6-7 h.

Desde el refugio de Bujaruelo y su "mítico" puente, 
entre gran diversidad de "adictos" nos ponemos en marcha.

Por la orilla izquierda del Ara, siguiendo buen camino, vamos remontando sin apenas desnivel sus aguas envueltos en día sublime ...

... y un entorno "de postal"; que nos hace abandonar el valle del Ara
 e ir ganando una senda con el pto. de Bujaruelo a la espalda ...

... saliendo al colorido valle de Otal, 
que nada tiene que envidiar a "sus vecinos".

Escoltados por la Sª de Tendeñera y vigilados por el muro fronterizo de Sandaruelo, llaneamos por el amplio camino que serpentea el valle con algo de compañía ... 

... hasta el fondo, donde encontramos un bonito rincón y su "viva" cascada.

A la par del Otal, "segundo plato" de la vuelta ...

... continuamos nuestra andanza, dejando atrás casi todo contacto humano y el valle de Otal por las primaverales laderas de Ordiso ...

... en las que a nuestro paso, 
"las amigas gramíneas" van soltando "su veneno" ...

... provocando pequeños estragos a un servidor, 
que nos hace"cobijarnos" junto a las aguas del regacho de Otal.

Al final, tras disfrutar más o menos del panorama; nos damos media vuelta y "tiramos" por la borda casi todos los planes. Solo cumplimos el más importante, el disfrutar del lugar. 

Pero "no hay mal que por bien no venga", y un cambio de aires da un giro a la situación. Lo otro queda apuntado en la lista de pendientes ...

👆#DeL RìO#👆