Forzados por el invitado, que nos la juega a la primera, a dejar pasar el día que mejor previsión tenía y cancelar otro bonito plan por Ordesa. Justo al que más ganas le teníamos. Aprovechando la situación que se ofrece, reponemos bien fuerzas y poco a poco con vuelta turística por los perdidos valles a los pies del Turbón recalamos de nuevo en el valle de Benasque.
Queriendo cambiar la rutina de la vida normal de la que todavía no nos hemos despegado; con gran parte del día por delante y cuando más agusto se estaría en una terraza con algo fresquito entre manos, montamos campamento dominando sobre el fondo del valle y algunas montañas del macizo de Posets, entre ellas la primera que queremos "tachar" de nuestra extensa lista. Desplegamos bártulos para dejar montadas las pesadas mochilas junto con los atuendos, casi más encarado todo a un día de invierno que a uno de verano. Tras el rato de trabajo, llenamos el buche de buenos alimentos de cara a tener reservas para la que se prevé como la más larga de las rutas y cuando es la hora de la cena, aventajados vamos a "planchar la oreja".
Tan temprano como da comienzo el mismo verano, nos ponemos en marcha sin ninguna pereza, ni dolores y rebosando ganas por los cuatro costados. Como no se esperan agua ni tormentas; el reloj no va "atropellándonos" está vez, y nos permite llevar cierta calma en lo que queda de preparativos, aunque sin dormirnos en los laureles. Todavía no viendo ni un poco de la luz del sol en las bajuras de Benasque, nos presentamos en la entrada del Valle de Estos respirando paz y total soledad, a pesar de encontrar en el parking un buen "puñado" de autos .
Ágiles salimos al terreno de juego, cosa que dura poco al cargar con las mochilas y disponernos a ir hacia una cumbre que todo el que haya visitado Benasque la ha visto, pero como su altura no llega ni siquiera a rozar los 3000 m no levanta interes alguno o más bien tirando a poco.
Escuchando las embravecidas aguas del Estos, vamos valle arriba en tranquilo y largo paseo por la amplia GR11 sin un alma a la vista ... |
... y mucho verde con algo de colorido abordando el entorno ... |
... que cruza el Bco. de Aigüeta, pequeño pero muy "vivo" ... |
... y acaba junto al Ibonet de Batisielles; donde dos patos nadan a sus anchas y vemos a la espalda un amenazante frente nuboso, que tapa al "sequito" del Perdiguero. |
Mejorando por momentos la situación más al N del verde valle de Estos, asomando la mole de Perdigueret entre las nubes ... Foto de Leyre |
... llegando en poco al ibon de Escarpinosa, sobre el que cae una fina y alta cascada. |
... mientras al otro lado contemplamos las agujas de Perramo y damos a las inmediaciones de sus ibones, que nos marcan el desvío al "ataque". |
Cara a cara con la mole de Ixeia, que ya tenemos claro de entre tantas cual es ... |
... a la vez que perfilamos las verticales paredes N de la Aguja ... |
... y sudando lo nuestro en una peleona subida de dos pasos adelante y otro p' atrás, salimos a un pequeño "circo" bajo la brecha de Ixeia. |
... pero conseguimos al final asomarnos al valle de Benasque, unos cuantos cientos de metros más abajo, desde la pequeña brecha de Ixeia. |
... montamos sobre el filo oriental; viendo por un momento las zonas de Escarpinosa, Batisielles y Estos que quedan a nuestros pies ... |
... y una vez las grises nubes nos engullen; luchando contra el viento, recorremos sin dificultades la salvaje arista con trepes y destrepes más algún paso expuesto ... Foto de Leyre |
... que nos lleva, tras un buen rato de diversión, a la poco visitada y hoy con gris panorama cima de la Agulla de Ixeia (2837 m). |
Foto cimera en la Agulla d' Ixeia (2837 m) ☝ y Leyre |
Lo que parecen cortinas de agua que se aproximan por el N, nos dan mala espina y mientras deshacemos con más cuidado que rapidez el afilado camino a la brecha, nos sorprende una leve caída de bolitas heladas que nos hacen pensar en que se viene un no anunciado diluvio... Foto de Leyre |
Enfilada la faena a su final y sin intenciones del cielo de venirse encima; volvemos plácidamente sobre nuestros pasos, rumbo a la parte más baja del valle de Estós, arropados por el arbolado y cruzándonos con "bastante" gente que va a los ibones, "diciendo" hasta luego al macizo de Posets entre cuyas alturas se encuentran ocultas muchas "montañas invisibles". |
🗻Del Rìo🗻
Hola Oscar.
ResponderEliminarUna montaña poco conocida, pero con una ascensión bien chula. Por esta montaña, un amigo le puso el nombre a su hija, Ixeia.
Un saludo
Muy poco si y eso que esta muy visible desde el mismo Benasque jejeje. Que bonita eleccion para un nombre =)
ResponderEliminarSaludos!!!