miércoles, 11 de diciembre de 2024

Santuari de Lord por el Tossal de Vallonga

Aprovechando que el camino de la vida nos lleva a la ciudad condal en los inicios de diciembre , dándose todavía unos últimos coletazos de “calor” más sol y que UNO siempre que sale tiene lo mismo en mente.. nos vamos en busca de nuevos “horizontes verticales” y quizá a catar los últimos metros de roca del año.
En medio del día alternativo, en el que el monte se ve de lejos y de paso pero no se toca,un rayo de luz nos arroja a lo más hondo.. cuando nos damos cuenta de que lo más imprescindible si no eres Alex Honnold para escalar se ha quedado en casa. Riendo por no llorar y al final buscando lo bueno a lo malo.. el plan del segundo día pasa al primero y con la vida fluyendo una vez más sola, nos quedamos a las puertas del prepirineo catalán y cerca de La Vall de Lord.. el escenario antes de la llegada del ansiado blanco ❄️.

Con otro poco más de “mala pata”, empieza no demasiado temprano la jornada. Tonos grises, sin pinta de que vayan a desaparecer, adornan el panorama mientras desayunamos a un ritmo en que el café no pueda enfriarse y cuanto antes, arrancamos hacia Sant Llorenç de Morunys.
El viaje es lento por la espesa niebla y cuando ya está perdida toda esperanza de tener “EL DÍA”, a punto de llegar a destino.. un atisbo de cielo azul empieza hacerse hueco.  Poco a poco el cielo se quiere ir abriendo más o menos, pero más más que menos 😜 mientras nos preparamos y justo cuando mejor pinta, es el momento de salir hacia el Santuari de Lord.

Llevados al SW, entre calles y carreteras, por unas pocas marcas
amarillas a las afueras de Sant Llorenç; nos engullen otoñales
 parajes prepirenaicos para encaminarnos en suave y solitario
paseo hacia la muralla rocosa de la Serra de la Creu del Codó …
… dejando atrás Sant Llorenç  “sin despeinarnos” y llegando a la ermita de San Serni.
Frondoso y verde escenario…
… combinado con mosaicos de conglomerado, ponen el tema para arriba. Sin demasiado esfuerzo ganamos metros mientras surcamos la breve ladera norte de la Creu …
… cambiando de vertiente por el
estrecho paso de Roc Foradat …
… y cayendo de seguido al otro lado, donde nubes 
más viento dominan la situación..y hay quien nos
pone los dientes largos por la vertical.
Yendo a lo nuestro, una ración de asfalto nos acerca a los pies
de la anubarrada Mola de Lord. No pensándolo demasiado,
porque de hacerlo igual hay quien se planta…
… enganchamos el zigzagueo del vía crucis, hasta subir al
 Santuari de Lord. No habiendo panorama con que deleitarse …
… tiramos hacia el lado contrario al de subida y apenas hemos empezado.. los cielos se abren, apareciendo ante nuestros ojos parte de las maravillas prepirenaicas de Solsones.
Por el camino del grau de Sallort, nos alejamos del santuario
 y bajamos por sombríos  parajes que se van tornando verticales …
… encontrándonos junto al camino de vuelta, un pequeño
 mirador y un poco más “escondida” la Bauma del Verger.
Algo así no se puede desaprovechar, menos aún cuando el mundo nos regala los primeros rayos del sol a eso de más de media mañana, y cogidos los mejores asientos.. almuerzo, tranquilidad, buena compañía y vistazas.. LA LOTERÍA 😉.

Finito nuestro turno en el rinconcito, regresamos
 a los pies de la Mola de Lord …
… con la idea de volver.. pero la realidad es otra. Un desapercibido
 desvío en la carretera del Santuari nos presenta ante una senda
en la soleada vertiente del Vall-llonga, por la que sin descanso ni
pérdida, rodeados de selva mediterránea , atacamos al techo de la ruta …
… viendo al pequeño vecino del la Mola de Lord, que se ha desprendido del "velo" …
… y cuando pisamos el cordal oriental,
un arreon oteando más cerca el final …
… nos hace poner la banderita
 en el Tossal de Vall-llonga (1252 m).
☝ y Leyre 
Sin previo aviso y derrepente, el cielo se torna gris y amenazante. No augurando nada bueno lluvia a lo más , ponemos pies en polvorosa y caemos al pequeño y salvaje valle de la Sobirana …
… donde una ligera lluvia se nos une a ratos sí
 y a ratos no, mientras recorremos las rocosas
 faldas del cresterio de Malagana …
… el cual acaba por poner "el obstáculo" con un facil trepe
 por resbaladiza roca, para encarar de vuelta a lo civilizado.
 “Todo vendido”, el tiempo aún quiere decir la última palabra.. pero sin dar opción, a toda velocidad descendemos las boscosas rampas de la Serra que nos dejan casi casi en San Llorenç , donde ponemos punto y final a la vuelta y casi seguro a la temporada otoñal 😜.
Ós

No hay comentarios:

Publicar un comentario